Las maderas frondosas también denominadas comúnmente maderas duras, son apreciadas por su nobleza y durabilidad. Las más conocidas de las maderas frondosas son el roble, el castaño, el eucalipto, el cedro, la haya y el nogal.
Características de las maderas frondosas
Maderas en general poco porosas y dificilmente impregnables.
Las maderas frondosas son de estructura leñosa con una amplia variedad de veteados, texturas y colores que van desde los colores pálidos al marrón oscuro.
Especies como el roble o el castaño contienen extractos, principalmente glúcidos, muy ricas en taninos. Estos taninos pueden generar manchas grises o negras en el acabado si no se bloquean empleando fondos antitaninos.
Aplicaciones de las maderas frondosas
Vigas y estructuras de casas antiguas, muebles y tarimas de interior, carpintería exterior e interior, etc.