Existen diferentes elementos que nos permiten el transporte de materiales y elementos, entre ellos, encontramos las eslingas, uno de los elementos de sujeción más utilizados.
Cómo se usan las eslingas
Las eslingas son unas cintas provistas por ganchos, que permiten soportar grandes cargas. Estas son hechas de un material muy resistente que permite la correcta sujeción de elementos, evitando que se deslicen.
Se emplean para poder manejar la carga y elementos de forma fácil y segura, ya sea con la ayuda de una grúa u otros tipos de transporte de elementos.
Debemos tener en cuenta, que la eslinga necesita un mantenimiento adecuado, para evitar que se produzcan determinados defectos. Por ello, debemos almacenarlas siempre en un lugar seco, evitando productos corrosivos y ácidos. Es importante que se realice una inspección periódica de su estado y se sustituya el elemento cuando sea necesario.
Tipos de eslingas
Existen diferentes tipos de eslingas, de tamaños y diámetros diferentes. Por ello, antes de seleccionarlas, deberemos tener en cuenta cuál será su aplicación correspondiente.
Os presentamos a continuación las diferentes tipologías que podemos encontrar:
-Ojo y ojo: son empleadas principalmente para la carga de elementos como máquinas y materiales de construcción. Es una eslinga formada por dos ojales, uno en cada extremo de la cinta que permiten el enganche al objeto que queremos transportar.
-Ojo invertido: es una tipología de eslinga muy similar a la anterior, la diferencia la encontramos en la posición de los ojales, ya que se encuentran torcidos para ofrecer una mayor comodidad. Es un elemento muy duradero y recomendable para aplicaciones de enlazado en las que se usen ganchos.
-Sin fin: este tipo de elementos de sujeción no tiene ningún ojal en los extremos, puesto que es un círculo continuo, es decir, no tienen extremos. Se puede emplear para la sujeción de varillas, tubos y otros elementos que sean propicios a resbalar, pues permite una gran adaptación y minimiza el riesgo de deslizamiento.
-Canasta: es una eslinga ideal para el transporte de materiales pesados o difíciles de transportar, puesto que tiene una superficie más ancha que permite distribuir mejor la carga. Están fabricadas con poliéster de alta tensión y son muy resistentes.
-Con ganchos: esta eslinga, esta contiene uno o dos ganchos en sus extremos, lo que permite enganchar de una forma más fácil y rápida. Los ganchos son resistentes y suelen tener cierre reforzado para evitar que se abran durante la sujeción.
Cada una de estas tipologías de eslingas, la puedes encontrar de diferentes materiales como acero, poliéster y nylon. También puedes encontrar otras herramientas que te ayuden al transporte como es el caso de los transpalets.
Recuerda que también puedes utilizar otros elementos como cajas y maletas o carros que te ayudarán al transporte de elementos.