¿Qué es un disolvente?
El disolvente es un tipo de producto que tiene varias funciones. Su cometido principal es el uso como producto para la preparación de pintura, barniz o laca antes de su aplicación. Generalmente, las pinturas suelen venir preparadas de fábrica para su aplicación directa, aunque no en todas. En estas últimas, es necesario hacer una dilución de la pintura con disolvente para darle ligereza y facilitar su aplicación.
Para hacer cualquier dusolución, es importante seguir las recomendaciones de los fabricantes en cuanto a cantidad se refiere. De lo contrario, la pintura (o el producto a aplicar) podría perder sus propiedades.
Qué disolvente elegir
Existen diferentes tipos de disolventes el función que con qué productos se van a mezclar y en qué piezas se van a aplicar. A grandes rasgos, podemos encontrar los siguientes tipos de disolventes.
Agua: el agua es el diluyente más común para disolver pinturas de base acuosa.
Aguarrás: el aguarrás es un disolvente que se utiliza para disolver pinturas e imprimaciones sintéticas y pinturas fabricadas con una base de aceite.
Acetona: se usa generalemente para eliminar restos de pintura que ya están secas y para la limpieza de utensilios.
Aguafuerte o Sulfamán: se trata de un limpiador muy potente sirve para desincrustar y limpiar las manchas de suciedad que son difíciles de eliminar. Es un producto muy corrosivo, de manera que se recomienda se recomienda utilizar siempre guantes.
Aceite de linaza: este producto sirve especialmente para proteger la madera. Por su lentitud a la hora de secarse, es recomendable usar con agentes secantes.
Alcohol: sirve como limpiador y desengrasante.
Disolvente universal: es el disolvente que se usa para la mayoría de pinturas, lacas, barnices o imprimaciones
En caso de tener cualquier duda con la elección de tu disolvente, ponte en contacto con nosotros, pues estaremos encantados de asesorarte.